Y no, no voy a hablar de la serie que pasaron en RCTV de pelis o episodios de mujeres maltratadas y golpeadas... era así que se llamaba no??
Este post viene más bien como reflexión sobre esos pequeños detallitos que a veces nos callamos (y no sólo las mujeres) como para no complicar más una situación determinada...
Me explico...
En diciembre, Otto y yo decidimos irnos en carro desde Madrid hasta Bilbao para conocer un poquito esa parte del país. Buscamos el carro en Hertz en la mañana y arrancamos pal norte. El día era soleado y no hacía nada de frío, así que ibamos de lo más contentos por la carretera A-1
disfrutando del camino y de la música.
Paramos en Burgos a comer. La entrada a la ciudad es espectacular por la vista que ofrece la catedral entre los edificios y las colinas. Rápidamente ubicamos un parking para el carro y bajamos a dar una vuelta y a buscar un sitio donde comer. Evidentemente pasamos por la Puerta de Santa María y nos encaminamos hacia la catedral. Todo se veía bastante desierto, miré el reloj "Y claro! dije. Si son las 3 de la tarde... es la hora de la siesta..." Pero encontramos un restaurancito con un menú que se veía bastante decente.
La Puerta de Santa María Otto se decidió por algo ligerito: una sopa castellana (que lleva
huevo) con
morcilla de Burgos y
chorizo de PRIMERO (osea
ESO fue el primer plato... todavía faltaba MÁS comida) y de segundo creo que fue carne... Yo pedí un revoltillo de ajetes con champiñones de primero y bacalao a la vizcaína de segundo... más malo por cierto... pero yo también, quien me manda a mi a estar pidiendo algo a la vizcaína en Burgos!!!!
La sopita del nene En fin, que después de esa comilona y un buen
café arrancamos (una vez más) para Bilbao.
En un punto de la carretera, de repente vimos como el vallecito que se abría frente a nosotros estaba cubierto por una niebla MUY espesa, nos miramos como preocupados pero nos hicimos los locos, total, todavía había luz de día...
A medida que nos ibamos acercando al vallecito escondido iba también obscureciendo... y en un momento nos vimos en medio de una niebla súper espesa... mientras Otto estaba pendiente de los otros coches y del límite de velocidad yo me encargaba de mirar los carteles... hacía rato que habíamos entrado al País Vasco y mientras que alguno de los carteles dijera Bilbao con una flecha yo me sentía tranquila... hasta que la niebla sencillamente no me dejó ver más... ni carteles ni nada...
A pesar de que la situación era BASTANTE estresante mantuvimos la cosa calmada oyendo musiquita y hablando pajita, pero empecé a preocuparme cuando por fin recuperé la visibilidad de los carteles y todo lo que ponían no sólo estaba en euskera lo que dificultaba su rápida lectura y comprensión, sino que además no aparecía en mi mapa... nefasto...
Y en eso leo en un cartel: "Bienvenido a
Castilla y León", pelando los ojos volteo a mirar a Otto que está concentradísimo en la carretera... y pensé: "Bueno no se dió cuenta... mejor no le digo que volvimos a entrar en Castilla y León..." me hice la loca y seguimos rodando...
En un momento agarré mi celular para revisarlo y puf! me dí cuenta de que me había quedado sin batería... volví a mirar de reojo a Otto que seguía casi que abrazando el volante (es que no se veía un soberano car..jo!!!) "Mejor no le digo que nos quedamos sin celular..." nuevamente, me hice la loca...
De repente un cartelito me anunció que estábamos entrando nuevamente al País Vasco... "Uf! pensé, menos mal que no le dije nada... ya volvimos a donde teníamos que estar..." Rodamos un rato más tratando de ubicarnos, yo seguía con la musiquita... y un poco más relajada. Pero la tranquilidad me duró MUY poco...
Por entre la niebla ví que el siguiente cartel decía: "Pamplona pa'lla (una flecha pues)"
O.O
Y 45 segundos después un cartelito
rojo me anunciaba que estábamos entrando en la Provincia de
Navarra!!!!!!... volví a mirar a Otto y el pana nada que se daba cuenta... pero yo ya no podía callar... teníamos que hacer algo!!!
Continuará....